Facial
Biometria de reconocimiento facial
Los sistemas de reconocimiento facial se basan en una cámara que recoge puntos característicos del rostro de una persona, como pueden ser las distancias entre ojos, distancia con nariz, labios etc.

La tecnología de reconocimiento facial del terminal FaceStation que Biosys ofrece, ha podido superar estos puntos débiles inherentes a la tecnología convencional a través de una algoritmo avanzado y una tecnología adaptativa de iluminación IR, de infrarojos, patentada.
El terminal que Biosys ofrece permite que el proceso de extracción de la imagen facial sea robusto independientemente de las condiciones lumínicas a la vez que consigue unas velocidades de verificación increibles.
Esta tecnología rompedora del terminal BIO-FaceStation permite que el proceso de extracción de la imagen facial sea robusto independientemente de las condiciones lumínicas a la vez que consigue unas velocidades de verificación increibles (1:1,000<1segundo), que superan de largo otros dispositivos de tecnología de reconocimiento facial existentes en el mercado.
Historia
El reconocimiento facial automatizado es relativamente un concepto nuevo. Desarrollado en los años 60, el primer sistema semiautomático para reconocimiento facial requería del administrador para localizar rasgos en las fotografías (como ojos, orejas, nariz y boca) antes de que éste calculara distancias a puntos de referencia en común, los cuales eran comparados luego con datos de referencia.
En los años 70 Goldstein, Harmon, & Lesk [1], usaron 21 marcadores subjetivos específicos tales como el color del cabello y grosor de labios para automatizar el reconocimiento facial. El problema con estas soluciones previas era que se computaban manualmente. En 1988 Kirby & Sirobich aplicaron análisis de componentes principales, una técnica estándar del álgebra lineal, al problema del reconocimiento facial. Esto fue considerado algo así como un hito al mostrar que eran requeridos menos de 100 valores para cifrar acertadamente la imagen de una cara convenientemente alineada y normalizada.
En 1991, Turk & Pentland, utilizando las técnicas Eigenfaces, el error residual podía ser utilizado para detectar caras en las imágenes [3] — un descubrimiento que permitió sistemas automatizados de reconocimiento facial en tiempo real fidedignos. Si bien la aproximación era un tanto forzada por factores ambientales, creó sin embargo un interés significativo en posteriores desarrollos de éstos sistemas.
La tecnología inicialmente capturó la atención del público a partir de la reacción de los medios a una prueba de implementación en el Super Bowl de la NFL en enero de 2001, la cual capturó imágenes de vigilancia y las comparó con una base de datos de fotoarchivos digitales. Esta demostración inició un muy requerido análisis sobre cómo usar la tecnología para satisfacer necesidades nacionales, mientras se tomaban en consideración las preocupaciones sociales y de privacidad del público.
Hoy la tecnología de reconocimiento facial está siendo utilizada para combatir el fraude de pasaportes, soporte al orden público, identificación de niños extraviados y minimizar el fraude en las identificaciones.